Día Internacional Del Adulto Mayor
“Vejez sana, personas adultas mayores felices”
Datos y cifras…
Según los reportes de Asmet salud del año 2021 y primer semestre de 2022, el 15% del total de sus afiliados son adultos mayores (n=302.553), de los cuales a 1837 personas se les diagnosticó demencia tipo Alzheimer, a 2098 personas depresión, a 2335 ansiedad, a 2024 personas trastorno mixto de ansiedad y depresión, y a 168 usuarios trastornos asociados al uso de alcohol y otras sustancias; enfermedades que pueden generar algún grado de dependencia para la realización de las actividades de la vida diaria y disminución de la calidad de vida y perdida de años productivos.
Cada 1 de octubre se celebra el día internacional de las personas mayores y Asmet se une a esta fecha para celebrar su existencia, promover la participación en los diferentes programas de promoción de la salud y prevención de la enfermedad, así como reforzar la necesidad de incorporación de hábitos y estilos de vida saludables encaminados en mantener un envejecimiento activo y saludable.
¿Quiénes son los adultos mayores?
Los adultos mayores son las personas que se encuentran en la etapa de la vida denominada vejez, y se refiere al último ciclo vital de las personas, también llamada tercera edad. En Colombia se inicia a partir de los 60 años de edad. Las personas adultas mayores son sujetos de derecho, socialmente activos, con garantías y responsabilidades, tienen muchas potencialidades y pueden aportar mucho a la familia y comunidad.
¿Qué es el envejecimiento?
Es un proceso irreversible que comprende muchas dimensiones de los seres humanos; inicia con la concepción, se desarrolla durante el curso de vida y termina con la muerte. Las personas envejecen de múltiples maneras dependiendo de las experiencias, eventos críticos y transiciones afrontadas durante su vida.
¿Qué es el envejecimiento saludable?
Es un proceso continuo de optimización de oportunidades para mantener y mejorar la salud física y mental, la independencia y la calidad de vida a medida que avanzan los años.
¿Cómo envejecer saludablemente?
Aunque algunas de las variaciones en la salud de las personas mayores se deben a la genética, los factores que más influyen tienen que ver con el entorno físico y social, en particular la vivienda, el vecindario y la comunidad, así como características personales como el sexo, la etnia o el nivel socioeconómico.
Mantener hábitos saludables a lo largo de la vida, en particular seguir una dieta equilibrada, realizar actividad física con regularidad y abstenerse de consumir tabaco u otras sustancias nocivas, contribuye a reducir el riesgo de enfermedades no transmisibles, mejorar la capacidad física y mental y retrasar la dependencia de los cuidados.
Términos principales: envejecimiento saludable
- La capacidad funcional comprende las capacidades que permiten a una persona ser y hacer lo que es importante para ella. Hay cinco dominios clave de la capacidad funcional, que los factores ambientales pueden ampliar (o restringir). Estas capacidades son: Satisfacer las necesidades básicas; aprender, crecer y tomar decisiones; tener movilidad; establecer y mantener relaciones, y contribuir a la sociedad.
- Tener la posibilidad de vivir en entornos que apoyan y mantienen la capacidad intrínseca y la capacidad funcional es fundamental para el envejecimiento saludable. La capacidad funcional se compone de la capacidad intrínseca de la persona, las características del entorno que afectan esa capacidad y las interacciones entre la persona y esas características.
- La capacidad intrínseca es la combinación de todas las capacidades físicas y mentales de una persona e incluye su capacidad de caminar, pensar, ver, oír y recordar. Distintos factores influyen sobre la capacidad intrínseca como la presencia de enfermedades, los traumatismos y los cambios relacionados con la edad.
- El entorno comprende el hogar, la comunidad y la sociedad en general. En el entorno se encuentra una serie de factores que abarcan el entorno construido, las personas y sus relaciones, las actitudes y los valores, las políticas de salud y sociales, los sistemas que las sustentan y los servicios que prestan.
Hábitos que favorecen el envejecimiento saludable
- Promover la actividad física de la persona mayor: El ejercicio físico regular y adaptado para mayores está directamente relacionado con un menor riesgo de mortalidad. La OMS recomienda que las personas mayores de 65 años realicen al menos entre 150 a 300 minutos a la semana (en promedio 30 minutos diarios) de actividades físicas aeróbicas moderadas. También se deben añadir ejercicios de fortalecimiento muscular moderados durante tres o más días a la semana, para así mejorar la capacidad funcional y disminuir algunos riesgos como las caídas.
Beneficios:
- Prevención y reducción de los riesgos de enfermedades de origen cardiometabólico, como la obesidad, la diabetes tipo II
- Disminución de dolores músculo-esquelético asociados al proceso de envejecimiento
- Mantenimiento de un peso saludable y aumento de la musculatura y capacidad física; lo que conlleva una mejora de la funcionalidad y rendimiento físico para una disminución del riesgo de caídas y fracturas
- Incremento de la longevidad y, por tanto, disminución de la discapacidad
- Mejoría de fuerza y flexibilidad
- Fortalecimiento del sistema inmunológico
- Previene, controla y mejora los síntomas de enfermedades crónicas
- Conserva y mejora la función cognitiva
- Disminución de la probabilidad de sufrir depresión, ya que mejora la salud emocional y la autoestima
- Mejora el estado de ánimo, porque reduce la dependencia ante los demás
- Maximiza la salud psicológica
- Ayuda a conciliar el sueño y mejorar la calidad de este
- Fomentar la estimulación cognitiva de la persona mayor: El deterioro cognitivo se produce porque hay una limitación de renovación celular y una ralentización de la mayor parte de los procesos. Sin embargo, dicha degeneración no se debe solo al proceso biológico, sino que también depende de factores como el social, familiar y ambiental. La estimulación cognitiva es un conjunto de técnicas y estrategias que pretenden optimizar la eficacia del funcionamiento de las distintas capacidades y funciones cognitivas tales como:
- Talleres de lectura y discusión literaria.
- Talleres de manualidades, como cerámica, pintura, costura o jardinería.
- Aprender idiomas o estudiar por placer.
- “Brain Training” o juegos de entrenamiento cerebral.
- Ir al cine o al teatro.
- Hacer meditación guiada.
- Tocar un instrumento.
- Musicoterapia.
Beneficios:
- Ayuda en la generación de conexiones neuronales
- Reduce los niveles de estrés y ansiedad
- Mejora las funciones cognitivas como: memoria, atención, lenguaje
- Relentiza la aparición o proceso de enfermedades neurodegenerativas
- Aumenta la autonomía y las relaciones sociales
- Mejora la autoestima, confianza y bienestar.
1. Cuidar la salud psicológica de la persona mayor: Más de un 20% de las personas mayores de 60 años sufren algún trastorno mental o neuronal y el 6,6% de la discapacidad de ese grupo se atribuye a trastornos mentales y del sistema nervioso.
Es importante reconocer y tratar las enfermedades mentales en las personas mayores. Realizar una escucha activa para así combatir enfermedades psicológicas. Algunas señales de advertencia de dichos trastornos incluyen:
- Cambios en el estado de ánimo o el nivel de energía
- Cambios en los hábitos alimenticios o de sueño
- Aislarse de las personas y dejar de realizar actividades que antes disfrutaba
- Sentir confusión, olvidadizo, enfadado constantemente
- Mostrar ira, irritabilidad o agresividad
Si se llevan a cabo los hábitos mencionados con anterioridad, como el ejercicio físico, la estimulación cognitiva y las relaciones sociales, la salud mental del mayor será positiva. Sin embargo, a nivel poblacional también es relevante plantear que sin ciertas condiciones es complicado llevar a cabo un envejecimiento positivo. Un buen sistema de salud, de protección social y buenas condiciones ambientales garantizará que sea más fácil. Recordar que la consulta y seguimiento por psicología es un derecho al cual puede acceder toda la población colombiana, no solo como mecanismo de control de las enfermedades de salud mental, sino como mecanismo y estrategia de prevención de las enfermedades mentales y mantenimiento de la salud.
2. Aumentar la implicación social de la persona mayor: Uno de los mayores pesares de la tercera edad es la soledad. Se trata de un problema social que va intrínsecamente relacionado con la salud mental. La soledad no solo afecta al bienestar psicológico de las personas mayores, sino que también se relaciona con peores niveles de salud y mayor riesgo de mortalidad. El apoyo social es un elemento protector necesario para las personas de la tercera edad.
En este habito se contemplan las adecuadas relaciones sociales, como el fomento de espacios de participación intergeneracional siendo estrategia para la disminución de la discriminación con relación a la edad (edadismo), el maltrato y la vulneración, así como la incorporación activa de la persona adulta mayor a la familia, la comunidad y la sociedad.
3. Alimentación saludable: Los requerimientos alimentarios cambian conforme al paso de los años, por lo cual es importante modificar algunos hábitos alimentarios como:
Comer alimentos que le entregan muchos nutrientes sin demasiadas calorías extra, como:
- Frutas y vegetales (elija diferentes tipos con colores vivos)
- Granos integrales, como avena, pan integral y arroz integral
- Leche descremada y queso bajo en calorías, o leche de arroz o de soya fortificada con vitamina D y calcio
- Pescados, mariscos, carnes magras, aves y huevos
- Frijoles, nueces y semillas
Evite las calorías vacías o huecas: Estas son alimentos que tienen muchas calorías, pero pocos nutrientes, como papas fritas, dulces, productos horneados, bebidas azucaradas y alcohol
Prefiera alimentos bajos en colesterol y grasas: Especialmente evitar los que contienen grasas saturadas y trans. Las saturadas son grasas de origen animal, mientras que las trans son grasas procesadas en margarina y grasa alimentaria. Se pueden encontrar en los productos horneados que se venden en tiendas o alimentos fritos en los restaurantes de comida rápida.
Tome suficientes líquidos: No se deshidrate. Algunas personas pierden la capacidad de sentir sed a medida que envejecen. Además, ciertos medicamentos pueden aumentar la importancia de beber suficientes líquidos.
- Realizar seguimientos médicos periódicos: Permitirá el conocimiento del estado de salud de adulto mayor, así como la instauración de elementos de protección de la salud y prevención de enfermedades. Es fundamental para llevar una vejez saludable y activa.