Enfoque Diferencial en Salud Reconocer la diferencia nos hace una sociedad más justa, Boletín #128
¿Sabes qué es el enfoque diferencial en salud?
Es un elemento clave que deben tener todas las instituciones para prestar sus servicios, en el cual se reconocen que, si bien todos somos iguales ante la ley, existen ciertas personas o grupos de población que a lo largo de la historia han sufrido y siguen sufriendo de actos de discriminación y por ello tienen derecho a recibir un trato acorde a sus particularidades y vulnerabilidades, y recibir una atención integral, protección y garantía de sus derechos, que permitan eliminar la desigualdad y las barreras que a menudo presentan.
¿Qué personas están incluidas en el enfoque diferencial?
- Todas las personas menores de 18 años.
- Personas embarazadas.
- Personas pertenecientes al colectivo LGTBIQ+.
- Adultos mayores.
- Personas con discapacidad.
- Víctimas de conflicto armado.
- Personas pertenecientes a minorías étnicas (indígenas, afrodescendientes, palenqueros, raizales, gitanos, Rom).
¿Cuáles son los objetivos del enfoque diferencial?
- Procurar el bienestar y el mantenimiento de una adecuada salud.
- Proteger los derechos en salud.
- Contribuir a la reducción de cualquier forma de discriminación.
- Favorecer la inclusión.
Consideraciones a tener en cuenta en la atención con enfoque diferencial:
Personas menores de 18 años: la atención con enfoque diferencial en esta población debe hacer el reconocimiento de sus derechos y velar por su cumplimiento, teniendo en cuenta que frecuentemente sufren de marginación, maltrato, negligencia, abuso o violencia, y que al no ser adultos muchas veces sus opiniones no son escuchadas; por ello la atención diferencial debe considerar a las personas en esta etapa de la vida como protagonistas y procurar su sano crecimiento y desarrollo en todas las esferas de la vida.
Mujeres: históricamente las mujeres se han considerado como el sexo débil, invalidando su importante rol social, han sido sometidas a todo tipo de violencias solo por el hecho de ser mujeres, y se les ha negado muchos derechos que se consideraba solo los hombres podían tener y, aunque por ley este panorama ha cambiado, aún persiste desigualdad, por ello el enfoque diferencial hacia las mujeres busca que reciban todas las atenciones que requieran, y se protejan sus derechos.
Personas embarazadas: aunque estar en embarazo no es una enfermedad, si es una etapa que requiere unos cuidados especiales, por ello, el enfoque diferencial a estas personas debe garantizar que tanto la persona gestante como su bebé tengan acceso a todos los servicios necesarios, que tengan un impacto positivo en la salud y en la calidad de vida.
Colectivo LGTBIQ+: las personas pertenecientes a esta comunidad deben tener un enfoque diferencial que reconozca su diversidad, que permita eliminar el estigma y la discriminación.
Adultos mayores: el enfoque diferencial a todas las personas que están en la etapa más avanzada de la vida debe procurar velar por respetar su autonomía, su toma de decisiones y evitar demoras que retrasen la mejoría o control de su situación de salud.
Personas con discapacidad: el enfoque diferencial a esta población debe estar orientado a minimizar las barreras que tienen para acceder a los servicios.
Victimas de conflicto armado: las personas que han sufrido las consecuencias de los conflictos en sus territorios deben tener una atención especial, que permita restaurar sus condiciones o modos de vida de forma segura.
Minorías étnicas: el enfoque diferencial para las minorías busca reconocer la cultura, la diversidad y la identidad que guardan los diferentes grupos minoritarios, respetando sus saberes y su forma de ver y entender el mundo, e integrándolos a la atención, sin que se vulneren los derechos fundamentales.
¿A qué atención tienes derecho si perteneces a uno o más de estos grupos?
- A un trato digno y humanizado como cualquier persona merece.
- A que se respeten tus creencias y formas de expresión cultural.
- A que el lenguaje que se use sea claro y cordial.
- A que las personas que te atienden te traten con respeto, sin recibir burlas o prejuicios, que muestren empatía, reconozcan tus necesidades y busquen satisfacerlas de la mejor manera posible.
- A que seas llamado por el nombre con el cual te identificas así en tu documento aparezca otro (comunidad LGTBIQ+).
- A que el personal te brinde confianza y guarde tu confidencialidad y privacidad.
- A tener acceso a ayudas que permitan eliminar barreras en la atención tales como rampas, sillas de ruedas, ayudas audiovisuales, etc.
- A que en caso de que se te haya vulnerado algún derecho, por ejemplo, has sido víctima de cualquier tipo de violencia, se desarrollen las acciones necesarias para restituir esos derechos.
- A recibir una atención integral, con oportunidad y calidad, y que sea incluyente.